Quizás sea mi modo de vida el que me hace perder batalla tras batalla, guerra tras guerra. Me llegan momentos de arrepentimiento espontáneo, sobre lo que hice o dejé de hacer. Toda acción tiene consecuencias, quizás ahora me toque pagar. Pero no pienso perder una batalla, por culpa de otras guerras ajenas a ésta.
No quiero perder la guerra sin haber luchado antes, gastando el mas mínimo ápice de energía en ella. No dejaré que mi pasado me afecte, actuaré a favor de mis valores, y sé qué tengo puesto en cada orden. Creo, que es lo correcto, y creo... que lo correcto en este caso es no bajar las brazos. Jamás. Por mucho que la cosa se torne oscura y compleja, tengo que seguir, si lo consigo podría encontrar la luz que me ilumine para un buen tiempo. Sería algo precioso. Pero es algo que hoy es imposible, y mañana, y dentro de dos semanas. El tiempo ahora es mi aliado. Te demostraré mis fuerzas día tras día, sin rendirme -de ti-, sin cansarme -de ti-.
Me haces falta. Es algo que noche tras noche, voy pensando y va dando fuertes golpes en mi cabeza. Malos meses, dando tumbos, y parece que ahora llega la tranquilidad, que seguirá a la tempestad. Pero no he sembrado vientos, no puedo conseguir tajada, me quedarán las manos vacías pero una sonrisa en el pecho, por no haberme rendido, y por hacer -por ti-, lo que siempre quise haber hecho.
http://www.youtube.com/watch?v=rC0-yGGC_ok&feature=related
ResponderEliminarvaya basura de flipao no?
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